Detrás de la caída histórica de los precios del crudo existe un conflicto que se ha vuelto más brutal con el paso del tiempo: la guerra del petróleo.
A pesar de que se han librado varias contiendas hasta la fecha, se perfila que este último enfrentamiento será el más devastador de todos. Teniendo en cuenta el desplome de la demanda causado por la crisis del coronavirus, así como un aumento en la oferta dado por los incrementos en la producción planteados por países como Rusia y Arabia Saudita.
Pero ¿qué es la guerra del petróleo exactamente y quién la lidera en la actualidad?
¿Qué es la guerra del petróleo?
El 8 de marzo de 2020, Arabia Saudita comenzó una guerra de precios con Rusia, que desencadenó una gran caída en el precio del crudo. En Estados Unidos, el precio disminuyó en un 34%, mientras que el precio del crudo mundial cayó en un 26% y el petróleo Brent en un 24%.
¿Qué originó la guerra?
El conflicto se produjo luego de que Rusia rechazara la propuesta de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), de la que Arabia Saudita es líder de facto, de retirar del mercado 1,5 millones de barriles diarios, la mayor reducción de la oferta desde diciembre de 2008.
Para los expertos, la ruptura de Rusia buscaba una disminución en el precio del petróleo que debilitara a los productores estadounidenses. Por lo general, estos se consideran más vulnerables a las caídas, ya que tienen costos de producción más altos.
Aunque estos productores también son competidores de Arabia Saudita, los analistas coinciden en que su nueva política, aumentar la producción a más de 10 millones de barriles diarios, estaba orientada al inicio de una guerra de precios con Rusia.
Arabia Saudita comenzó a hacer descuentos de más de US$8 en su precio de venta a países de Europa noroccidental, que son un mercado importante de Rusia. Así como redujo sus precios en Asia, alrededor de US$4-6 por barril, y en Estados Unidos, US$7 por barril, como una forma de proteger su posición en el mercado dada la caída de la demanda y los precios.

Guerras del petróleo lideradas por Arabia Saudita
Arabia Saudita es uno de los mayores exportadores de petróleo del mundo. Por esta razón, no es extraño que se haya enfrentado a conflictos de este estilo con anterioridad.
Primera guerra
La primera guerra de precios liderada por Riad inició en junio de 1985. Durante una reunión sostenida en Taif, Arabia Saudita, el rey Fahd advirtió a los países de la OPEP que su país no podría soportar más recortes de producción. En noviembre el mercado sería inundado con petróleo árabe, lo que haría que su precio cayera de US$31 a US$9,75 por barril. La guerra de precios duraría 13 meses llegando a su fin en diciembre de 1986.
Segunda guerra del petróleo
El segundo conflicto ocurriría 11 años después en una reunión llevada a cabo en Yakarta, Indonesia. En noviembre de 1997, Riad aumentó la oferta para hacerle frente a Venezuela, que se estaba lucrando rápidamente con las cuotas del mercado estadounidense. Sin embargo, la demanda caería a raíz de una crisis en los mercados emergentes y un invierno cálido, haciendo que el precio fuera de US$20 a menos de US$10 por barril. La guerra terminaría después de 17 meses en abril de 1999.
Tercera guerra
La tercera guerra de precios es la que más ha durado hasta la fecha con un total de 22 meses. Inició en noviembre de 2014 durante una reunión en Viena, en la que Riad manifestaría su malestar de que países no pertenecientes a la OPEP, se beneficiaran de los recortes impuestos por la organización. Del mismo modo, existía cierta preocupación por el impacto que había causado en la industria el petróleo de esquisto estadounidense.
Desde ese momento Riad aumentó exponencialmente su oferta. Pero el conflicto terminó en un colapso del precio del barril que fue de US$100 a US$27,88. La paz llegaría en septiembre de 2016 y con ella un cambio radical de las medidas tomadas por Arabia Saudita en cuanto a recortes. Más tarde, Rusia también se uniría a esta postura.
¿Quién va ganando la guerra del petróleo ahora mismo?
Rusia y Arabia Saudita tenían previsto salir de la guerra de precios como los contendientes más fuertes. Lo que significaba causar problemas financieros a los productores de esquisto, así como a otros productores con altos costos y políticamente inestables.

Sin embargo, el resultado podría ser diferente al esperado y afectar a ambos países. Por ejemplo, a solo unos días del comienzo de la contienda, Arabia Saudita se ha visto afectada. Las acciones de la empresa Aramco sufrieron una caída de casi 9% en la apertura de los mercados asiáticos, mientras que su Bolsa de Valores retrocedió en un 8%.
El daño también se extiende a otros productores de crudo. Entre ellos, países como Venezuela e Irán, que combinarían el colapso del precio del petróleo con las sancione; Brasil, Angola y Nigeria que pueden experimentar cambios importantes en sus economías, así como los productores de esquisto que han acumulado deudas razonables y están al borde de la bancarrota o reduciendo personal.
Entonces, ¿quién va ganando la guerra de precios del petróleo? A corto plazo, los únicos que tienen un beneficio claro son los conductores y transportistas que llenarán sus tanques por menos dinero.
Conclusión
La actual guerra de crudo encabezada por Arabia Saudita y Rusia podría tener un resultado diferente al esperado por ambos exportadores. En una situación en la que no se distingue un ganador a corto plazo, es necesario ver las siguientes medidas a tomar por cada uno de los contendientes.
Hasta el momento, los analistas consideran que esta cuarta guerra de precios encabezada por Riad podría ser muy larga. Sobre todo, si se tienen en cuenta los antecedentes históricos y la incertidumbre económica generada por el coronavirus.