La libertad financiera significa tener control sobre tus finanzas y deshacerte del estrés que te provoca tu situación económica ahorros actuales y tu futuro financiero. La definición exacta de libertad financiera es diferente para todos, pero sabrás que la has logrado cuando te sientas preparado para asumir gastos inesperados y enfrentarte a grandes decisiones que la vida te presenta. Tus responsabilidades económicas no desaparecerán, pero te sentirás listo para cumplirlas y menos preocupado por los gastos diarios.
Si dependes únicamente de tu sueldo mensual, liberarte del estrés económico puede parecer una meta imposible. Sin embargo, si sigues algunas recomendaciones, asumes la responsabilidad de tus decisiones y eres consciente de tus hábitos monetarios, podrás conseguir la libertad financiera antes de los 40.
¿Qué es la libertad financiera?
La libertad financiera es un objetivo común para muchos porque simboliza el control financiero y está asociada con un estilo de vida libre de estrés. Dado que muchas personas tienen diferentes puntos de vista sobre la economía, sus visiones personales de la libertad financiera también pueden ser diferentes. En función de lo que consideres importante, tu visión de libertad financiera puede incluir:
- Tener suficiente dinero en tu cuenta de ahorros para cubrir gastos inesperados, como la reparación de un coche.
- Contribuir con una parte de tu sueldo para pagar un plan de jubilación.
- Realizar pagos mensuales de tus préstamos o de la deuda de tu tarjeta de crédito.
- Contribuir con una cierta cantidad a tu cuenta de ahorros cada mes.
- Poder hacer una gran compra, como un coche o una casa.

Tienes responsabilidades financieras que tienes que asumir todos los meses, como el alquiler, el seguro o la compra de comida mensual. Estos gastos, junto con otras cargas económicas inesperadas, pueden hacerte creer que lograr la libertad financiera puede ser complicado. Sin embargo, una vez que te creas tu propio concepto de libertad financiera, puedes alcanzarla siguiendo estos pasos.
Pasos para lograr la libertad financiera
Dado que la libertad financiera es diferente para todos, tu plan será específico en función de tu situación y tus metas. No existe una fórmula única para la libertad financiera que puedan seguir todos los que quieren lograrla. Sin embargo, existen algunos pasos comunes que puede seguir:
Establece metas específicas
Establecer metas financieras específicas te mantendrá motivado para mejorar tu situación económica y también te permitirá medir mejor tu progreso. El objetivo de lograr la libertad financiera es demasiado amplio, por lo que es importante analizar exactamente qué significa para ti este concepto.
Los objetivos que escribas deben incluir números y plazos específicos. Aunque es importante ser realista acerca de estos objetivos, esfuérzate por realizar cambios en tu estilo de vida para poder alcanzarlos de verdad. Revisa tus objetivos con frecuencia para asegurarte de que estás en el camino correcto.
Establece un presupuesto
Una de las mejores formas de comprender a dónde va tu dinero cada mes es crear un presupuesto. Al revisar tus gastos actuales, puedes decidir dónde puedes recortar los gastos para disponer de más efectivo para ti.
Este dinero adicional debe usarse para uno de los objetivos financieros que estableciste, como pagar una factura dentro de un período de tiempo determinado, aumentar el saldo de tu cuenta de ahorros o crear un plan de vida o de jubilación. Al mantener tu dinero organizado mediante un presupuesto estricto, es menos probable que derroches en compras que no necesitas y seguramente te concentres más en tus objetivos financieros.
Paga tus deudas
Tus tarjetas de crédito, préstamos y otras deudas suelen ser los mayores obstáculos para lograr la libertad financiera. Todo el dinero que te queda después de pagar las facturas domésticas se destina a estas deudas y no se puede utilizar para crear su cuenta de ahorros o contribuir a tu plan de jubilación. Si tus deudas tienen altas tasas de interés y tardas demasiado en pagarlas, desperdiciarás dinero que podría haberse utilizado para lograr tus objetivos financieros.

Identifica las deudas con las tasas de interés más altas, que generalmente son las tarjetas de crédito, y págalas. Para estar libre de deudas, deberás considerar:
- Hacer transferencias de saldo sin intereses, si son beneficiosas para tu situación.
- Llamar a las entidades con que te hayan concedido las tarjetas de crédito o préstamos para negociar un plan de pago.
- Analizar la consolidación de deuda con la entidad.
- Pagar más de la cuota mínima requerida cada mes.
- Usar cualquier ingreso adicional, como las bonificaciones laborales, para el pago de deudas.
- También deberás cumplir con tu presupuesto mensual para que puedas dejar de usar tus tarjetas de crédito al realizar compras. Esto evitará que aumente la deuda que quieres pagar.
Inicia un plan de ahorro
Estar preparado para los gastos, tanto esperados como inesperados, es importante si quieres prepararte para conseguir la libertad financiera. Si una factura considerable por la reparación de un coche o una cena con amigos puede hacer que tu presupuesto mensual se reduzca considerablemente, es hora de concentrarte en tu plan de ahorros.
Cada vez que recibas tu sueldo mensual, reserva una cierta cantidad e ingrésala en una cuenta de ahorros. Utiliza tu presupuesto para calcular con qué cantidad te sentirás cómodo contribuyendo a este plan de ahorro cada mes. Establece un saldo mínimo que quieres mantener en la cuenta.
Si tiene que usar el dinero para un gasto, ingresa poco a poco las cantidades necesarias a la cuenta de ahorros hasta que puedas reponer el saldo. El dinero de la cuenta de ahorros puede evitar que te enfrentes a un desastre financiero si no puedes ceñirte a tu presupuesto durante uno o dos meses.
Vive de lo que ganas
La única forma de salir realmente de las deudas y experimentar la libertad financiera es vivir dentro o por debajo de tus posibilidades. Termina con todas tus deudas e incluye tu plan de ahorros a tus principales prioridades de cada mes. Analiza en qué gastas tu dinero usualmente y trata de omitir los gastos sin los que puedes vivir cómodamente. Al reducir la cantidad de veces que sales fuera de casa o pagas por cosas innecesarias, puedes destinar parte de tu sueldo a lograr tus metas.
Crea un plan financiero a largo plazo para conseguir la libertad financiera
Aunque pagues tus deudas, ingreses dinero en tu cuenta de ahorros y empieces con tu plan de jubilación, tu trabajo para conseguir la libertad financiera aún no ha acabado. Lo ideal es repetir este ciclo para asegurarte y mantenerte en el camino hacia el logro de tus metas financieras.
Si dejas de ser constante y no controlas tu presupuesto, es posible que tu deuda comience a acumularse o el saldo de tu cuenta de ahorros comience a disminuir. Evita volver a la situación financiera con la que comenzaste y continúa luchando por la libertad financiera al apegarse a estos hábitos financieramente responsables.