Era la reforma más importante de la Comunidad y se pretendía afrontar los principales retos en dos ámbitos:
- hacer frente a la creciente competencia internacional a través de la realización de un mercado interior sin fronteras que eliminase los obstáculos existentes,
- profundizar en la construcción comunitaria.
La principal innovación del Acta fue ampliar el uso del voto por mayoría en lugar de unanimidad en el Consejo de Ministros, mayores prerrogativas para el Parlamento Europeo, reguló por primera vez algunas de las políticas complementarias como: social y de medio ambiente y la cuestión monetaria aparece por primera vez.